III ENCUENTRO DE PARTICIPACIÓN

El pasado 19 de junio EAPN llevó a cabo en el Salón de Actos de IMSERSO y en las aulas del Colegio de La Salle el III Encuentro de Participación de Personas en Situación de Pobreza y Exclusión Social en el que participaron 50 personas, mayoritariamente mujeres.

Hemos escuchado muchas voces desde el año 2010 que que nos decían “¡No es posible la participación”!, “¡No es posible la participación con personas poco, o “nada” preparadas”! No esto, no, aquello, no lo otro…

Nos sentimos muy orgullosos de haber demostrado que esas negativas carecen de valor y aunque hemos convivido con ellas, no las hemos aceptado ni las aceptaremos. Si el derecho de la participación ciudadana en Melilla tiene muchas taras por resolver, promover espacios de participación dedicados a personas en situación de vulnerabilidad social cobra especial relevancia, más aún en un contexto en el que es costumbre descartar de antemano a las personas que, en el casillero social, hemos colocado en el cajón de la exclusión, negándoles que puedan ser sujetos, actores, de la vida, de su vida, en sociedad; mucho menos que puedan ser autores de su propio guión.

SITUACIONES LÍMTE

Las personas que no tienen ingresos, que no encuentran trabajo, que viven de las ayudas de Bienestar Social y de pensiones no contributivas, las personas que sobreviven mediante la asistencia de alimentos, albergues, y además tienen dificultades idiomáticas, tienen limitaciones muy claras para participar y… son víctimas de estereotipos muy marcados.

Las personas que están preocupadas por sobrevivir cada día de sus vidas, con un futuro incierto para sí y sus hijos, no están bien informadas de cómo funciona la sociedad en la que viven, de cuáles son sus derechos y obligaciones, si existen o no recursos y responsables en la función pública que debieran estar a su lado para ayudarle a sortear los baches que aparecen en su vida.

Por otro lado, muchos de sus interlocutores, no saben o pretenden no saber que la persona a la que atienden carece de la información necesaria, ya que les parece que se trata de “cuestiones obvias y que todo el mundo sabe”; esto, sumado a la falta de tiempo para dedicarse a la atención personalizada, muchas veces lleva a que los funcionarios no se demoren en dar explicaciones, por lo que las personas en situación vulnerable tienen que recurrir a terceros no expertos, que no son eficaces como informadores, a menos que sí tengan confianza y conocimiento de las entidades sociales para acercarse a ellas.

LOS ENCUENTROS DE PARTICPACIÓN
Celebrados anualmente a nivel europeo y estatal, estos encuentros se han revelado como una fórmula de participación que permite situar a la persona en el centro de acción por la inclusión, favoreciendo su integración en la sociedad de una manera más efectiva. Así los participantes –unas treinta personas se reúnen con técnicos de entidades del sector social para aportar una visión en primera persona de la pobreza y la exclusión social, sus causas y consecuencias. Sus conclusiones y propuestas de solución se harán llegar directamente a los representantes de las Administraciones Públicas (local y estatal).

El III Encuentro de Participación de Personas en Situación de Vulnerabilidad social Coincide con el Año Europeo de los Ciudadanos que se centra en lo que ya se ha conseguido para la ciudadanía y en responder a sus expectativas para el futuro. Estimula un debate con la ciudadanía, y sobre sus derechos.

Nuestra ciudad y nuestro país tiene ante sí importantes retos que superar. El impacto de la crisis económica está generando una profunda desigualdad social. Crear un proyecto europeo común no solo depende de unos países, ni de unos gobiernos. Depende de todos los ciudadanos y ciudadanas.

¿Cuáles son nuestras apuestas?
• Apostamos por las personas
• Apostamos por el conocimiento y el acceso a los Derechos.
• Apostamos por la participación y el debate informado

El objetivo es que este III Encuentro contribuya al empoderamiento de quienes participen como ciudadanos y ciudadanas, apoyando sus capacidades para comprender, organizar y reconducir las dificultades y problemas por los que atraviesan.

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Otros objetivos…

– Conocer, formarse y capacitarse sobre los Derechos Fundamentales.
– Potenciar el tejido de redes que favorezcan su proceso de inclusión en la sociedad.
– Visibilizar y expresar sus problemáticas y propuestas, tanto entre pares y miembros de entidades, como ante las autoridades responsables y los representantes.

Metodología de los talleres
Los talleres han introducido una metodología participativa que, en sí misma, busca marcar una diferencia con las experiencias de otro tipo de talleres más numerosos amplios.

Podemos llamarlo “metodología de las mesas camillas” de nuestras abuelas, en las que se reunían para conversar con gente amiga o de la familia, en los días de frio. La diferencia es que, entre las participantes, no nos conocíamos antes de sentarnos, pero nos hemos logrado conocer y “re-conocer” después.

Los talleres han explorado los problemas principales a los que se enfrentan las personas con respecto a temas concretos., relacionados con los Derechos Fundamentales que recoge el Tratado de Lisboa de la Unión Europea. Concretamente se han elegido 4 artículos:

Artículo 22.- La diversidad cultural, religiosa y lingüística son factores de enriquecimiento de la sociedad española, pero existe una creciente presión xenófoba y etnocentrista, que puede actuar en contra.

Artículo 23.- La igualdad entre mujeres y hombres no existe en el ámbito laboral, tampoco en el empresarial, el académico y el directivo, donde subsisten los “techos de cristal”. Para las personas en situación de pobreza, los problemas de género se combinan con otros factores que potencian la discriminación. La violencia de género, con una prevalencia especial entre la población inmigrante, es un factor de riesgo importante.

Artículo 24.- Los derechos del niño no están garantizados dada la existencia de unas tasas de niños en riesgo de pobreza del 24% (porcentaje estatal). Esto entra en contradicción con la Convención sobre los Derechos del Niño (CDN), aprobada apenas en 1989 y ratificada por España en 1990. Esta Convención es una norma vinculante en nuestro sistema jurídico, compromete a “asegurar al niño la protección y el cuidado que sean necesarios para su bienestar”, adoptando para ello “todas las medidas administrativas, legislativas y de otra índole para dar efectividad a los derechos reconocidos en la presente Convención”. Hay casi 1 millón de niños extranjeros en España, que viven una situación precaria si no logran documentarse correctamente antes de cumplir los 18 años. Es especialmente grave la situación de riesgo de los menores extranjeros no acompañados.

Artículo 26.- La integración de las personas discapacitadas no está totalmente cubierta por la falta de políticas de empleo positiva por parte de las empresas, el Tercer Sector y del sector público, ya que las cuotas de contratación son bajas y no se cubren adecuadamente. La aplicación de la Ley de Autonomía Personal es deficitaria y desigual en el territorio. Las personas con discapacidad intelectual y con enfermedades mentales no están evaluadas de forma adecuada por dicha Ley, por lo que este problema recae en las familias.
Si estas se encuentran en situación de pobreza, los niveles de riesgo se agravan. Muchas “enfermedades raras”, que afectan a cerca de 2,5 millones de personas en España, no están reconocidas por el sistema sanitario y la atención médica y social de las personas afectadas se encuentra también el situación de vacío y sobrecarga familiar.

Estas mesas no han sido exposiciones sucesivas, han consistido en un DIÁLOGO entre las personas participantes y sus representantes, quienes han aportado y expresado unas ideas que se han ido trabajando previamente en las entidades sociales miembro de EAPN Melilla.